Francisco I: un jesuita argentino moderado de larga experiencia pastoral
Buenos Aires
El nuevo papa Francisco, Jorge Bergoglio, es un jesuita argentino de 76 aƱos,
austero y de tendencia moderada, con una larga experiencia pastoral, gran lector
y apasionado por el fĆŗtbol y la suerte de su club San Lorenzo.
Arzobispo de Buenos Aires y primado de Argentina, es un hombre tĆmido y de
pocas palabras que goza de gran prestigio entre sus fieles, que aprecian su
total disponibilidad y forma de vida, alejada de toda ostentación.
"Es un hombre muy pastor, cerca de la gente. Eligió el nombre por remitirse a
San Francisco de Asis, que renovó la Iglesia y que fue el hombre de la humildad,
de la pobreza y del diĆ”logo", reveló su exvocero, Gustavo BoquĆn.
"Es un hombre audaz. Se levanta muy temprano para rezar. Viaja en colectivo
(autobus) y tiene buena comunicación con la gente", dijo BoquĆn.
Como religioso surgido de la CompaƱĆa de JesĆŗs, una orden combativa nacida en
el siglo XVI para enfrentar a la reforma protestante, Bergoglio no evitó la
confrontación polĆtica.
"Vivimos situaciones de pobreza escandalosa, de enfermedades, y todo nos
lleva a una falta de justicia", dijo en una homilĆa durante el gobierno del
fallecido presidente NƩstor Kirchner (2003-2007), esposo de la actual
mandataria, Cristina Kirchner, reelegida en 2011.
A pesar de los roces que tuvo con su gobierno, Bergoglio rindió tributo a
NĆ©stor Kirchner tras su muerte por un infarto en 2010, cuando dijo que "serĆa
una ingratitud que el pueblo olvidara a este hombre".
El malestar por sus duras homilĆas en el solemne Tedeum en las celebraciones
del DĆa de la Independencia (9 de julio de 1816) hizo que los Kirchner llevaran
la ceremonia a templos provinciales para no compartir el escenario con Ʃl.
Pero la relación mejoró con Cristina Kirchner, quien ha bloqueado tenazmente
todo proyecto de implantar el aborto en Argentina, actitud que le valió un
reconocimiento silencioso de la Curia.
No obstante, el enfrentamiento volvió al primer plano cuando el Gobierno
peronista impulsó en 2010 la ley de matrimonio homosexual.
"No seamos ingenuos: no se trata de una simple lucha polĆtica; es la
pretensión destructiva al plan de Dios", dijo Bergoglio poco antes de la sanción
de la norma.
"Debemos defender el bien inalterable del matrimonio y la familia", criticó
desde el pĆŗlpito.
También se opuso a una mÔs reciente ley de identidad de género que autorizó a
travestis y transexuales a registrar sus datos con el sexo elegido.
En una de sus Ćŗltimas homilĆas llamó a construir "una Iglesia de puertas
abiertas", otro gesto de su inclinación por las reformas que recuperen al
catolicismo mundial.
Bergoglio nació el 17 de diciembre de 1936 en el seno de una familia modesta
del barrio popular de Flores, en la capital argentina, hijo de un trabajador
ferroviario de origen piamontƩs y una ama de casa.
"En los confesionarios de la Iglesia de San JosƩ de Flores, a los 17 aƱos,
Bergoglio tuvo una revelación divina para ingresar al sacerdocio", dijo a la AFP
el pÔrroco, padre Gabriel, quien tiene una relación personal con el nuevo
papa.
PreferĆa el estudio a jugar al fĆŗtbol, a contramano de la mayorĆa de los
niƱos argentinos, aunque siempre estuvo pendiente de San Lorenzo, su club con
nombre religioso fundado por un cura.
"Cuando Jorge era chico jugaba a la pelota (al fĆŗtbol) con nosotros acĆ” en
(el barrio de) Flores, pero después cuando entró al noviciado estaba siempre
estudiando: pasaba por allĆ los sĆ”bados, nos veĆa jugando, nos saludaba y se
iba", dijo a la AFP Osvaldo Dapueto, de 68 aƱos, uno de sus amigos en la
niƱez.
Sus conocidos señalan que nunca abandonó la sensibilidad por los mÔs
desposeĆdos, con quienes tenĆa trato directo.
"Muchas de las personas pobres que vienen a alimentarse en el comedor de la
parroquia (San JosƩ de Flores) le han escrito cartas, y Bergoglio se las
contesta de puño y letra", señaló el cura Gabriel.
Bergoglio egresó de la escuela secundaria pĆŗblica como tĆ©cnico quĆmico y a
los 22 aƱos se unió a la CompaƱĆa de JesĆŗs, donde obtuvo una licenciatura en
FilosofĆa.
Tras incursionar en la enseƱanza privada, comenzó sus estudios de TeologĆa y
se ordenó como sacerdote en 1969.
A los 36 aƱos, en 1973, fue designado responsable nacional de los jesuitas
argentinos, cargo que desempeñó durante seis años.
Fue en los aƱos difĆciles de la dictadura argentina (1976-83) cuando
Bergoglio debió mantener a toda costa la unidad del movimiento jesuita,
penetrado por la TeologĆa de la Liberación, bajo la consigna de "mantener la no
politización de la CompaƱĆa de JesĆŗs", segĆŗn su portavoz Guillermo Marcó.
Sectores de la Iglesia sufrieron persecuciones e incluso fueron asesinados
dos obispos, varios sacerdotes y desaparecidos laicos y seminaristas durante la
dictadura, aunque Bergoglio recibe crĆticas supuestamente por no haber protegido
a dos curas jesuitas que luego fueron secuestrados en 1976, y despuƩs
liberados.
Luego, viajó a Alemania para obtener su doctorado y a su regreso retomó la
actividad pastoral como simple sacerdote en una parroquia provincial.
En mayo de 1992, Juan Pablo II lo nombró obispo auxiliar de Buenos Aires y
comenzó a escalar rĆ”pidamente en la jerarquĆa católica de la capital: fue
vicario episcopal en julio de ese aƱo, vicario general en 1993 y arzobispo
coadjutor con derecho de sucesión en 1998.
Se convirtió luego en el primer jesuita primado de Argentina y, en febrero de
2001, vistió finalmente el púrpura cardenalicia.
Según la prensa argentina, Bergoglio figuró entre los mÔs votados en el
cónclave de 2005, que eligió a Joseph Ratzinger como sucesor de Juan Pablo
II.
El Arzobispo goza de general prestigio por sus dotes intelectuales y dentro
del Episcopado argentino es considerado un moderado, a mitad de camino entre los
prelados mĆ”s conservadores y la minorĆa progresista.
Pese a su meteórica carrera en la jerarquĆa católica, sigue siendo un hombre
"muy humilde", añadió el cura Gabriel. Su rutina comienza a las 4 y media de la
maƱana y termina a las 21h00.
Es un gran lector de los escritores argentinos Jorge Luis Borges y Leopoldo
Marechal y del ruso Fiodor Dostoievsky, amante de la ópera y fanÔtico del club
de fĆŗtbol San Lorenzo, curiosamente fundado por un sacerdote.
Pero al parecer su pontificado no estarĆ” marcado por asiduas giras porque,
segĆŗn Eduardo GarcĆa, obispo auxiliar de Buenos Aires, "a Bergoglio no le gusta
viajar, no lo veo un papa viajero".

Post a Comment